Una de las noches después de cenar en la Gran Vía , nos dirigimos hacia la Puerta del Sol , y a medida que nos adentramos por una de las calles adyacentes se escuchaba una música de fondo , tocada por un grupo de músicos de la calle, que hacía tiempo que no escuchaba y que me hizo sentir como El cóndor pasa.
La visita nos ha dejado un buen sabor de boca , y la verdad no esperaba que me gustara tanto , por eso me gustaría volver de nuevo. También me gustaría agradecer a mis cuñados ( Albert y Alba ) por lo bien que lo han organizado.
Hace 11 años